Hilma af Klint:What Stands Behind the Flowers. Museo de Arte Moderno de Nueva York.
Foto: Jonathan Dorado.
En enero de 1917, la artista Hilma af Klint (1862–1944), anunció una nueva fase en su práctica. Durante la década anterior, se había dedicado a crear un ciclo épico de pinturas vibrantes, llenas de formas orgánicas y geométricas, que se cuentan entre las primeras incursiones en la abstracción de esa época. Su enfoque en estas obras estuvo motivado por exploraciones espirituales y guiado por instrucciones de mensajeros divinos. Sin embargo, al sentirse “adoctrinada”, comenzó a verse a sí misma como “un recipiente que se llena desde lo alto y que, por lo tanto, se ha estado desbordando constantemente”. Decidió entonces “llenar el cuenco a través del estudio de sí misma” y dirigió su atención hacia el mundo natural.
Estas investigaciones culminaron en sus Estudios de la naturaleza, una carpeta de cuarenta y seis dibujos que combinan representaciones tradicionales de plantas con flores y enigmáticos diagramas abstractos. Realizados en 1919 y 1920, los Estudios de la naturaleza revelan a af Klint como una naturalista de mirada aguda, cuya vasta comprensión botánica moldeó su visión artística. Para ella, esta observación minuciosa del entorno estaba indisolublemente ligada al descubrimiento espiritual: “Cuando volvemos la mirada hacia el reino vegetal”, escribió, “este nos brinda información sobre la composición de nuestro propio ser”.
Con el anhelo de “explicar lo que se esconde detrás de las flores”, af Klint ofrece una guía para mirar de forma atenta, vigilante y generosa. Comenzando con obras que dan testimonio de su compromiso constante con la naturaleza, e incluyendo materiales de su mundo botánico, esta exposición presenta por primera vez sus Estudios de la naturaleza. Al poner en diálogo la representación y la abstracción, la observación y la visión interior, el arte y la botánica, af Klint reconoce un ecosistema lleno de posibilidades y propone una forma de estar en el mundo basada en la interconexión de todos los seres vivos. “Este mundo”, declaró, “es el mejor libro de texto”. (Fragmento del texto, MoMA).
Portada de Hilma af Klint: What Stands Behind the Flowers, publicado por el
Museo de Arte Moderno, Nueva York, 2025.
Flores, musgos y líquenes. Concebida entre 1919 y 1920; copia de artista terminada en 1926. Cuaderno con acuarela, pintura metálica, lápiz y tinta. Fundación Hilma af Klint, Estocolmo.
Hilma af Klint. Abedul de la serie “Sobre la contemplación de flores y árboles”. 1922.
Acuarela sobre papel, 17 × 25 cm. Fundación Hilma af Klint, Estocolmo (HaK 639).
Hilma af Klint. Probablemente, Agaricus bisporus (Hongo cultivado). C. 20 de octubre de 1893. Acuarela, gouache, lápiz y tinta sobre papel, 41,6 × 30,3 cm (16, 3/8 × 11, 15/16 pulgadas). Museo de Historia Natural de Estocolmo. Archivo M. A. Lindblad.
Mucho antes de que el arte abstracto encontrara su lugar en la historia oficial, Hilma af Klint ya dibujaba el alma invisible de las cosas. Esta nueva exposición en el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA), dedicada a sus estudios botánicos, nos invita a mirar más allá de las formas, hacia la energía latente de la naturaleza, sutilmente trazada en cada hoja, en cada tallo, en cada pequeña flor o pistilo que contienen el gesto en el dibujo de una mujer que creía en la trascendencia de las cosas. En ese sentido, esta exposición no se trata solo de dibujos de plantas: se trata de mostrar ese lenguaje espiritual que florece desde la observación científica hasta el sentido místico, propio de una alma despierta como la de Hilma af Klint.
Hilma af Klint. Tulipa sp. (Tulipán). Hoja 35 de la carpeta “Estudios de la Naturaleza”. 20 de mayo de 1920. Acuarela, lápiz, tinta y pintura metálica sobre papel, 49,8 × 27 cm (19, 5/8 × 10, 5/8 pulgadas). Museo de Arte Moderno de Nueva York. Fondo del Comité de Dibujos y Grabados y donación de Jack Shear, 2022.
Hilma af Klint. Luzula campestris (Junco de campo), Viola hirta (Violeta peluda), Viola odorata (Violeta dulce), Chrysosplenium alternifolium (Saxífraga dorada de hojas alternas), Equisetum marvense (Cola de caballo de campo), Caltha palustris (Marigold de pantano), Ranunculus ficaria (Ranúnculo de higo), Carex sp. (Juncia). Hoja 4 de la carpeta “Estudios de la Naturaleza”. 9-15 de mayo de 1919. Acuarela, lápiz y tinta sobre papel, 49,9 × 26,9 cm (19,5/8 × 10,9/16 pulgadas). Museo de Arte Moderno, Nueva York. Fondo del Comité de Dibujos y Grabados y donación de Jack Shear, 2022.
Como se ha dicho, Hila af Klint fue una artista adelantada a su tiempo, pero, a su vez, estuvo profundamente enraizada en él. Su práctica botánica, iniciada durante sus años de formación en la Real Academia de Bellas Artes de Estocolmo, revela una rigurosa disciplina de observación, así como una temprana inclinación hacia lo inmaterial y hacia el misterio. Por lo mismo, en estos bellos estudios de helechos, flores, raíces y semillas podemos observar la manifestación latente, y esa voluntad de traducir lo visible en formas orgánicas que hablan desde el misterio, a través de pequeños gestos y símbolos propios de su cosmogonía artística y pictórica.
Vale destacar, además, que esta exposición en el MoMA cuidadosamente curada, nos sitúa frente a una dimensión menos conocida de su obra, pero que resulta fundamental para comprender su evolución como artista consciente del mundo invisible, pues recordemos, por ejemplo, la afinidad de las mujeres místicas con los elementos primordiales de la naturaleza, y cómo las plantas han sido de rotunda importancia para sus prácticas y aprendizajes. En este sentido, entendemos que aquí no hay grandes espirales ni diagramas cósmicos, pero hay, en cambio, una observación y una escucha atenta al mundo vegetal; una correspondencia secreta entre los ritmos de la naturaleza y los movimientos internos del alma. Así, cada línea parece seguir el pulso de una respiración más antigua que la nuestra. La respiración, sin duda, del alma vegetal del mundo.
Vista de la instalación de Hilma af Klint: What Stands Behind the Flowers en exhibición en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, del 11 de mayo al 27 de septiembre de 2025. Foto: Jonathan Dorado.
Vista de la instalación de Hilma af Klint: What Stands Behind the Flowers, en exhibición en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, del 11 de mayo al 27 de septiembre de 2025. Foto: Robert Gerhardt.
Vista de la instalación de Hilma af Klint: What Stands Behind the Flowers en exhibición en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, del 11 de mayo al 27 de septiembre de 2025. Foto: Jonathan Dorado.Estos dibujos botánicos los podemos considerar como ejercicios de precisión académica, así como las puertas a una sensibilidad increíblemente visionaria, porque lo que comienza como un registro científico de observación, termina por volverse en una suerte de escritura fluida, donde lo vegetal es también símbolo que vibra desde una conciencia que no separa lo espiritual de lo material, ni lo racional de lo intuitivo.
Desde el punto de vista institucional, es evidente que el museo propone, no solo, una mirada retrospectiva, sino una posibilidad de relectura sobre sus obras y sobre su mirada como artista mujer en una época donde surgían con ahínco las vanguardias, y el mundo natural, desaparecía del panorama. He aquí, nuevamente, la importancia de la mirada sensible y por qué no, femenina de una artista, mujer y quizás “bruja” como lo fue la de Hilma af Klint.
Para finalizar me surgen algunas preguntas: ¿Y si estos dibujos, fueran parte del gran proyecto esotérico de af Klint? ¿Y si cada pétalo dibujado encerrara una geometría sagrada? El gesto de observar una planta, y el de trazar un mandala, quizás no sean tan lejanos.
Hilma af Klint dibujó flores, pero aquellas no eran solo flores; porque, en ellas, ya estaba contenido todo su universo esotérico y simbólico en expansión.
Vista de la instalación de Hilma af Klint: What Stands Behind the Flowers, en exhibición en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, del 11 de mayo al 27 de septiembre de 2025. Foto: Robert Gerhardt.
Hilma af Klint. Helecho y polipodio de la serie “Sobre la contemplación de flores y árboles”. 1922. Acuarela sobre papel, 25 × 35 cm. Fundación Hilma af Klint, Estocolmo.
Hilma af Klint: Lo que hay detrás de las flores, se presenta en el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) del 11 de mayo al 27 de septiembre de 2025.
Curada por Jodi Hauptman, curadora sénior del Departamento de Dibujos y Grabados, con la colaboración de Kolleen Ku, Chloe White y Laura Neufeld, la muestra exhibe por primera vez la serie completa Estudios de la naturaleza compuesta por 46 dibujos botánicos realizados entre 1919 y 1920.
Fotografías: Cortesía MoMA.